Exposición temporal, Contracorriente
La roca sigue rodando. Dejo a Sísifo al pie de la montaña. Se vuelve a encontrar siempre su carga. Pero Sísifo enseña la fidelidad superior que niega a los dioses y levanta las rocas. Él también juzga que todo está bien. Este universo en adelante sin amo no le parece estéril ni fútil. Cada uno de los granos de esta piedra, cada fragmento mineral de esta montaña llena de oscuridad, forma por sí solo un mundo. El esfuerzo mismo para llegar a las cimas basta para llenar un corazón de hombre. Hay que imaginarse a Sísifo feliz. Albert Camus, El mito de Sísifo De acuerdo con la mitología griega, el titán Atlas fue obligado por los dioses a cargar sobre sus hombros el pesado globo en que estaba convertido el firmamento. Esta tarea extenuante y arbitraria es similar a la condena sufrida por el rey Sísifo, quien debía empujar una
Temporary exhibition – Museum of Modern Art, Medellín. 2020
Countercurrent The work of Martha Ramírez (Bogotá, 1957) is situated at the intersection of painting and photography, transferring to the pictorial plane events and thoughts that arise from the photographic image and are combined with the strokes and gestures of painting. Her work contains the consciousness that in photography there is something fundamental that cannot be registered and in painting there is something essential that cannot be photographed. In this encounter between matter and sensation, charges, forces, corporealities, and resistances appear—a kind of “inner movement” that tries to make visible what is not representable in the images extracted from mass media, historical documents, and personal archives. Ramírez’s paintings question the corporeality of the human being as a subjective and experienced reality that continually faces internal and external movements. The bodies represented, subjected to endless practices of strength and adaptation, show the efforts that require individual or collective energy for preservation,
Conversatorio MAMM entre Emiliano Valdéz y Martha Ramírez
1. Empecemos por el principio: ¿de dónde surgen tus imágenes? Con las imágenes suele suceder lo que, con muchas otras cosas en la vida, cuando se tiene una pregunta abierta por algo, ese algo aparece de manera natural, son encuentros que suceden desde la emoción, desde el presentimiento de que allí hay algo más de lo que se ve a simple vista. Son en todo caso imágenes surgidas del acontecer diario, imágenes que en su momento me hicieron sentido. Situaciones que cuando las veo, las registró en video o en fotografía y voy guardando en una suerte de banco de imágenes, que archivo en álbumes o en el computador, para someterlas luego a otras miradas y análisis donde la razón entra a participar más directamente. Hay también otro tipo de imágenes, unas que tienen una relación directa con el acontecer local o global, estas si las busco deliberadamente en los archivos
Entrevista Martha Ramírez, MAMM
1. ¿Quién es Martha Ramírez? Siempre es difícil definirse a uno mismo, nos tenemos tan cerca que la falta de distancia nos impide vernos en una dimensión más amplia y quizás más objetiva. Con esa salvedad, puedo decir soy una mujer comprometida y apasionada por lo que hace. Soy empática y sensible a las cualidades propias de la naturaleza humana y en esa medida soy una aprendiz de la vida en todas sus dimensiones. 2. ¿Cómo llegó al arte? Llegué al arte por una afinidad natural. Desde niña fui curiosa y desarrollé el gusto por observar todo lo que me rodeaba. La imagen en todas sus dimensiones siempre me causó fascinación, pasaba las horas mirando ilustraciones en los libros de cuentos y en las enciclopedias; cualquier revista o impreso que hubiera en la biblioteca de mi casa y que tuviera imágenes, despertaba mi una gran curiosidad. Muy pronto descubrí la lupa
El Horizonte poroso de Martha Ramírez
La artista Marta Ramírez presenta tres series recientes de su obra pictórica, en el Museo de Arte Moderno de Medellín. Es una lástima que, con todo el espacio que sobra en la nave central del Museo de Arte Moderno de Medellín, Mamm, donde hay más de media sala principal vacía, su equipo de curaduría no haya dedicado un poco más de atención a una obra tan diversa, reflexiva y refrescante como la de la maestra Marta Lucía Ramírez Uribe (Bogotá, 1957), ya que, en estos tiempos de incertidumbre, sus universos pictóricos resultan un destello de realidad (pura y dura) bien camuflada entre los detalles de sus técnicas y el esplendor de sus imágenes. En un recorrido por su muestra, titulada Contracorriente, el visitante puede conocer un poco de lo que propone la autora, solo un poco, de lo mucho que ha creado en más de medio siglo de carrera, mientras
Empatía
Empatía, muestra de Martha Lucia Ramírez en La Balsa Arte, Bogotá, parte de un acercamiento a aquello que la artista denomina ‘el tiempo de la imagen’ mediante el cual se enfatiza ‘la relación perdida con el cuerpo’. A partir de un deslizamiento entre la fotografía, como referencia visual, hacia la pintura como medio material, poético y estético, se manifiesta una carencia, un giro conceptual en la interpretación de la imagen, cuyo efecto se identifica como una incongruencia entre la lectura de los dos medios. Este giro semiótico permite identificar la disyuntiva entre lo ‘irrepresentable’ en la fotografía, y lo infotografiable de la pintura. El titulo de la muestra, Empatía, hace referencia tanto al enlazamiento entre medios, entre imágenes, como a la empatía que siente la artista con aquello que constituye el objeto de su obra. Hay una urgencia por explorar la relación cuerpo-experiencia, cuerpo-espacio, cuerpo-sociedad, en términos de vivencias colectivas,
Empatía: la lucha por desterrar al olvido
Martha Lucía Ramírez Uribe rescató en esta exposición los relatos que describen el estado de sufrimiento generado por absurdos en una sociedad que se jacta de humanista pero que es capaz de hacer morir a otros por una ideología o por la mezquindad. No había entendido el mensaje hasta que me vi de frente con su esencia. Antes de la cuarentena por el coronavirus, vi la exposición Empatía, de la artista plástica Martha Lucía Ramírez Uribe*, en Bogotá. Permanecí casi una hora y media analizando las 45 pinturas expuestas, tomando nota sobre ellas, procurando interiorizarlas. Pero me fue muy difícil, quizás porque aún no estaba dispuesto para abrirle las puertas. Y fue muy duro al inicio. Si plasmara aquí los comentarios que consigné durante mi regreso a casa, este texto sería enfático en resaltar que: “eso que muestran las pinturas ya lo vi en otro lugar”. Por supuesto que es
Los abrazos de Martha Ramírez: La pintura en el horizonte de la empatía
Martha Ramírez reflexiona sobre las imágenes que compartimos de este mundo en el que vivimos, tantas veces maltratado, convulsionado, y violento, y cuyos problemas nos son comunes. Imágenes que nos envuelven y también nos alertan, pues en ellas reconocemos nuestra propia y común vulnerabilidad, llena de luces y sombras. Ella dice que muchas veces, son las imágenes las que la encuentran, como si supieran que mirara con atención lo que sucede, y los detalles. Como las imágenes la interceptan con mayor celeridad que el ritmo pausado y reflexivo de su pintura, las conserva en reposo hasta que una idea o un acontecimiento las despierta. Otras veces, sucede lo contrario: es ella quien las busca: navega guiada por una emoción, por un presentimiento de que puede haber “algo más de lo que se ve a simple vista”. Cada imagen suya, es un testimonio de momentos muy específicos en los que “la