Demostrativos

En un mercado de pulgas catalán encontré un cuaderno escolar del año 1958, del liceo francés de Barcelona. En él, una tarea realizada por Irene Matas, ejemplifica con frases simples, el uso de los pronombres demostrativos, posesivos y numerales.  Por fuera del contexto gramatical, las frases utilizadas en el ejercicio invocan, los afectos más cercanos, las posesiones más preciadas, los lugares más entrañables y la vida misma, logrando alcanzar una fuerte carga poética que, aunada a su caligrafía, activaron en mi, memorias entrañables.

Años después, trabajaba sobre los abrazos, y el juego y la intuición, me llevaron a poner en diálogo ambas situaciones.

El tambor de pergamino circular, soporte en el que dibujé los abrazos, llegó como forma y como piel, a contener el abrazo.